Cuando se trata de dolor anímico

El dolor moral se relaciona con una representación mental, una mala noticia o un duelo por ejemplo, aunque tampoco está exento de repercusiones corporales. El dolor psicogénico, o dolor idiopático, es un dolor moral que sólo tiene expresión corporal.

Puede manifestarse ocasionalmente con una cefalea, es decir dolor de cabeza, por una tensión o un dolor de vientre (mientras se espera un resultado importante por ejemplo) que refleja una simple tensión psíquica, o bien, puede expresarse diariamente, como dolor crónico idiopático, en cuyo caso refleja un gran sufrimiento moral o conflictos psíquicos inconscientes. Existen diversos modos de somatización, vinculados con procesos psíquicos distintos: los dolores psicosomáticos, la depresión enmascarada, los trastornos histéricos y la hipocondría.  El psicoanálisis aclara en parte los mecanismos psicológicos que originan esos estados. Son ejemplos de este tipo de dolores, ciertos dolores del ano, de las mamas (mastodinia), ciertas lumbalgias y otros dolores más difusos.

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